El aceite esencial de jengibre se obtiene por destilación por arrastre de vapor de la raíz de Zingiber officinale. Su composición química está dominada por sesquiterpenos como el zingibereno (≈30–35 %), β-bisaboleno, ar-curcumeno y β-sesquiphellandreno, junto con monoterpenos activos como el geranial y el borneol, responsables de su efecto estimulante, antiinflamatorio y antioxidante profundo.
A nivel cutáneo, el aceite esencial de jengibre actúa como un modulador microcirculatorio, activando la perfusión sanguínea local y favoreciendo el transporte de nutrientes y oxígeno hacia los tejidos dérmicos. Esta acción estimula la actividad fibroblástica y la síntesis de colágeno tipo I, promoviendo una piel más firme, revitalizada y con tono uniforme.